MÁS VALOR MENOS EXCUSAS

El valor supone un esfuerzo máximo. Ante una situación que nos resulta desagradable, no mirar hacia otro lado. Mirar cara a cara al miedo es complicado.

Nuestra mente va a inventar miles de excusas para que no lo hagamos. Porque enfrentarse  al miedo, significa salir de nuestra zona de confort. Esa inseguridad y nervios que genera  es desagradable.

Lo que a lo mejor no sabes. Si hasta ahora te has quedado en ese punto. Es que una vez superada esa barrera del miedo. Lo que te espera es mucho mejor. Comienzas a tomar el control de tus decisiones.

Hasta ahora pensabas que lo tenías. Pero nada más lejos. Tu vida estaba atada a las circunstancias que te rodeaban. No digo que esas circunstancias sean malas para ti. Pero es como el agua estancada, no se mueve y con el tiempo apesta.

Si no tocas ni bebes de esa agua estancada, no te va a pasar nada. Pero si por un casual te caes en el charco, mejor no quieras saberlo.

Es tan simple como hacer una reflexión: ¿Quieres tener una vida lineal? O ¿Quieres avanzar y descubrir todo lo que te estás perdiendo?

El miedo es muy listo y se alimenta de tus dudas y de tu ignorancia. Cuanto más tiempo estés en el agua estancada, más feliz será. Puede campar a sus anchas.

De repente, un día, decides ponerte unas botas altas impermeables. Decides atravesar ese charco de agua hasta el otro lado.

No te digo que lo saltes, vaya a ser que te des un culetazo. Con las botas está bien. En ese momento en que empiezas a meter el primer pie y después el otro. El miedo empieza a temblar. Curioso, pero así es.

En el momento en que te das cuenta que con la debida protección, puedes atreverte con todo lo que te propongas. Tu vida cambia automáticamente.

Te sientes capaz de hacer lo que te propongas. Aunque sepas que tendrás que buscar la manera de vencer al miedo. De encontrar la estrategia adecuada. Pero lo importante es que sabrás que eres capaz.

Lo único imposible es lo que no se intenta.

Frases Motivadoras: #elmotivosoyyo

Vanessa Martín Ardanaz

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